El té negro proviene de una planta
llamada Camellia sinensis la misma planta que produce el té verde, sin embargo, tienen sabores y aromas
diferentes debidos a sus procesos de producción. Este té pasa por un proceso de
elaboración que consta de cuatro etapas: marchitamiento, enrollado,
fermentación y finalmente secado.
Propiedades
Las vitaminas y los flavonoides le
confieren un efecto antioxidante, aunque en cantidades menores que el té blanco
o el té verde.
Es rico en minerales, tales como el zinc, calcio, cromo, magnesio, manganeso, hierro, potasio,
fósforo, flúor y aluminio.
Beneficios
Diurético.
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Astringente.
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Estimulante.
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Antioxidante.
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Evita la
diarrea.
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Mejorar el aprendizaje.
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Ayuda contra el vómito.
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Saciante y bajo en calorías.
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Reduce el riesgo de cáncer.
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Ideal en los cuidados del cabello.
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Previene la enfermedad de Parkinson.
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Previene la formación de las caries
dentales.
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Reduce el riesgo de padecer ataques
cardíacos.
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Ayuda a que el colesterol HDL
(colesterol bueno) no se oxide.
¿Cómo usar el té negro? |
La forma adecuada de preparar el té
negro es la siguiente:
La temperatura del agua debe ser de
100 ºC, es decir, cuando alcance el punto de ebullición.
La cantidad de té es la de una cucharada
por taza, aunque se puede ajustar la
misma según los justos (más cargado o más suave).
La infusión debe reposar alrededor de
4 minutos y nunca por menos de 1 minuto.
Cuanto más tiempo dejes el té, más
amarga será la preparación final.
El té negro puede contribuir a la
pérdida de peso, siempre y cuando se consuma sin azúcar. Un chorrito de zumo de
limón añade sabor para hacerlo más fácil de beber.
El consumo recomendado de té negro es
de 2 y 3 tazas por día, evitando así la aparición de efectos secundarios.
Efectos adverso
Los efectos adversos que puede
producir el consumo excesivo de té negro son los siguientes:
Problemas gástricos.
Nerviosismo.
Calambres y otros trastornos.No tomar en caso de estreñimiento, colon irritable o problemas estomacales.
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